El desastre en el que se ha convertido el lanzamiento del nuevo Boeing 737 Max tiene un nuevo capítulo que añade aún más problemas sobre la aeronave. Se ha detectado un nuevo fallo de seguridad diferente del que provocó los accidentes. El resultado no se ha hecho esperar: más cancelaciones.
United Airlines anunció su intención de extender las cancelaciones anteriores hasta el 3 de septiembre, según medios ingleses. Mientras tanto, Southwest Airlines, que previamente había anunciado cancelaciones hasta principios de septiembre, añadió en un comunicado que retiraría los 737 Max de su programa hasta el 1 de octubre. La aerolínea dijo que los cambios afectarían a unos 150 vuelos por día.
Por su parte Aeromexico señalo que confía en que los cambios en el software del avión Boeing 737 MAX 8 serán eficientes, para lo cual trabajarán en capacitar a los pilotos con el nuevo sistema, comentó James Sarvis, director de Operaciones de la aerolínea mexicana. De igual manera, el directivo admitió que tener el avión sin operar ha generado gastos para la aerolínea mexicana, por lo cual podrían buscar una compensación por parte de Boeing. En marzo de 2019, Aeromexico suspendió operaciones de dicho modelo, tras un accidente de Ethiopian Airlines con esa aeronave, en el que fallecieron 157 personas.
Los anuncios se producen en medio de informes de que los pilotos de prueba de la Administración Federal de Aviación (FAA por sus siglas en inglés) descubrieron un nuevo problema crítico de seguridad en el sistema de software anti-bloqueo del 737 Max, llamado MCAS, durante las simulaciones de vuelo. Según una fuente familiarizada con el asunto que habló con el Washington Post, a los pilotos les preocupaba que no pudieran “seguir rápida y fácilmente los procedimientos de recuperación requeridos”.

La FAA dijo en un comunicado que “encontró un riesgo potencial que Boeing debe mitigar”. El Washington Post informó que el fallo estaba separado de la que se sospechaba que había jugado un papel importante en dos siniestros que causaron la muerte de 346 personas.
Durante la revisión de la FAA de la actualización del software del 737 MAX y tras las recientes sesiones de simulador, la Administración Federal de Aviación identificó un requisito adicional que ha pedido a la compañía que añada a los cambios de software a los implementados  a lo largo de los últimos ocho meses. Boeing está de acuerdo con la decisión y solicitud de la FAA  y está trabajando en el software requerido.

La FAA obligó oficialmente a los aviones a permanecer en tierra en marzo, y no está claro cuándo volverán a recibir autorización para un vuelo comercial. La FAA dijo esta semana que está “siguiendo un proceso exhaustivo, no un plazo prescrito” al revisar la aeronave.
Por su parte Boeing señalo que la seguridad de los aviones es la máxima prioridad de Boeing. Durante la revisión de la FAA de la actualización del software 737 MAX y las sesiones recientes del simulador, se identificó un requisito adicional que le ha pedido a la compañía abordar a través de los cambios de software que la compañía ha estado desarrollando durante los últimos ocho meses. La revisión y el proceso de la FAA para devolver el 737 MAX al servicio de pasajeros están diseñados para dar como resultado una evaluación completa y exhaustiva. Boeing está de acuerdo con la decisión y solicitud de la FAA, y está trabajando en el software requerido. Abordar esta condición reducirá la carga de trabajo del piloto al tener en cuenta una fuente potencial de movimiento de estabilizador sin control. Boeing no ofrecerá el 737 MAX para la certificación por la FAA hasta que se haya cumplido con todos los requisitos para la certificación del MAX y su retorno seguro al servicio.