Por José Antonio Quevedo C.
La Brigada de Fusileros Paracaidistas es conocida como una unidad de élite, debido a que sin importar el tipo, naturaleza, complejidad, irregularidad o clandestinidad de sus misiones siempre son cumplidas. Dado que es la única unidad de la Secretaría de la Defensa Nacional  especializada en paracaidismo y su amplia experiencia en combate, se sabe que varios elementos de esta unidad han sido seleccionados para formar parte de la Fuerza Especial del Alto Mando.
Su historia surge después de las muchas misiones exitosas  que llevaron a cabo las aerotropas en la Segunda Guerra Mundial, por lo que el entonces  Secretario de la Defensa Nacional, general Francisco L. Urquizo, y el entonces Jefe de la Dirección de Aeronáutica Militar el General Gustavo Salinas Camiña, presentaron una propuesta para crear un cuerpo de tropas aéreas que estuviera altamente capacitado en el manejo de las diferentes armas y en la radiotelefonía que era la forma de comunicación más moderna de la época.

Siendo así que la Dirección de Aeronáutica Militar emitió, a mediados de abril de ese año, una convocatoria a todos los integrantes de la Secretaría de la Defensa Nacional, en especial a los oficiales y tropa de los planteles militares, invitándolos a formar parte de la nueva unidad que se iba a formar. En la convocatoria solo se pedía que los aspirantes tuvieran un mínimo de servicios encuadrados en alguna unidad, sin importar si eran de arma o servicio.
A la invitación respondieron más de 360 elementos, 170 oficiales y 190 de tropa, los cuales presentaron rigurosos exámenes de cultura general, médicos y sobre todo físicos.  Siendo aprobados 20 oficiales y 30 de tropa, entre los que se contaba personal de caballería, infantería, transmisiones, mecánicos aéreos e incluso un cadete del Colegio Militar. A todos se les dividió en dos grupos. El primer grupo quedó integrado por ocho oficiales y 17 de tropa, quedando al frente del mismo el entonces capitán B. A. Plutarco Albarrán López, primer paracaidista militar de nuestro país y que a la larga  ostentaría el grado de General Brigadier Paracaidista DEM.

Para el 18 de mayo de 1946, un avión C-47 despego del campo de Balbuena, con los 25 elegidos, que formarían pie veterano de los fusileros paracaidistas mexicanos, para realizar el curso y entrenamiento de paracaidismo en el Airborne School de Fort Benning, Georgia, Estados Unidos. Un segundo grupo recibió el mismo entrenamiento que el primero y recibió sus alas y diploma de paracaidistas y planeadoristas el 3 de agosto.
Una vez que ambos grupos fueron reunidos, se preparó el primer salto de paracaidistas en nuestro país para  celebrar un aniversario más de la Independencia de nuestra nación, el 15 de septiembre de 1946.

El salto colectivo se llevó a cabo en el Puerto Aéreo Central de la Ciudad de México, en presencia del Secretario  de la Defensa Nacional, autoridades militares y gran cantidad de público. Al concluir el evento se le impusieron las alas de paracaidistas a los 18 oficiales y 32 de tropa, los cuales fueron el pie veterano de los paracaidistas en México. Al mes siguiente los 50 paracaidistas se trasladaron a  Puebla, para tomar un curso de infantería y que todos tuvieran una formación complementaria y unificar los criterios de las aerotropas. El 28 de agosto de 1948 se graduó la primera antigüedad de paracaidistas entrenados en México y cuatro años después la Compañía Mínima de Aerotropas pasó a ser el Batallón de Paracaidistas, el cual fue abanderado el 15 de septiembre de 1952, por el entonces presidente de la República, Miguel Alemán Valdés, en el Campo Marte.
El 1/o de abril de 1953, el Batallón de Paracaidistas dejó de pertenecer al Cuerpo de Guardias Presidenciales y pasó a depender de la Jefatura de la Fuerza Aérea Mexicana, con lo que el Alto Mando del Ejército y Fuerza Aérea Mexicana volvió a contar con una unidad capaz de realizar operaciones especiales con personal altamente calificado, sin importar la integridad física, con una mística única en la que cada uno de los paracaidistas forma parte de una unidad capaz de operar en todo terreno y en cualquier momento que se le requiera. En donde se necesitaba la decisión, el coraje, un alto sentido de la disciplina y un alto adiestramiento, ahí estaban los paracaidistas.

En de enero de 1969, surge la actual Brigada de Fusileros Paracaidistas (BFP) organizada en Cuartel General, una compañía de cuartel general y dos batallones. El tercer batallón es creado el 1o. de julio de 1974.  En 1983, se gradúa la primera antigüedad con personal femenino de la escuela Militar de Enfermeras. En 1994 es creada la Fuerza Especial (Anteriormente Grupo Aeromovil de Fuerzas Especiales) como unidad para misiones específicas con un alto nivel de discrecionalidad. La Escuela Militar de Paracaidismo fue establecida el 1 de agosto de 1999 y posteriormente fue reasignada como Centro de Adiestramiento de Paracaidismo, en mayo de 2002.

La Brigada de Fusileros Paracaidistas cuenta con un programa de adiestramiento anual, cuenta con instalaciones apropiadas en el Campo Militar Número 1-A; y se utilizan las zonas de salto de la Base Aérea de Santa Lucía, los campos de Tiro de San Miguel de los Jagüeyes, San Juan Teotihuacán, y La Marquesa, todos ellos en el estado de México, así como la región del Ajusco, en el D.F., y las regiones cercanas a los volcanes Popocatépetl e Iztaccíhuatl, en el estado de Puebla.

Los elementos de la BFP se encuentran constantemente en operaciones de alto impacto y contra el crimen organizado, por lo que su adiestramiento es constante y consta de
  • Rescate de rehenes
  • Protección y traslado de personalidades y detenidos
  • Operaciones de Intervención a instalaciones y vehículos
  • Combate urbano
  • Emboscadas y contraemboscadas
  • Insurgencia y contrainsurgencia
  • Sabotaje de instalaciones enemigas
  • Eliminación de objetivos3
  • Operaciones de alto impactoAsí mismo la Brigada de Fusileros Paracaidistas es la Fuerza de Reacción Inmediata del Plan DN-III-E. Por lo que sus elementos también son entrenados en
  • Rescate
  • Primeros Auxilios
  • Rescate de aeronaves siniestradas (Operaciones de jurisdicción de la BFP dada su pertenecía a la Fuerza Aérea)
  • Resguardo de áreas de desastre
Los elementos de la Fuerza Especial de la Brigada de Fusileros Paracaidistas cuentan con los cursos de Fuerzas Especiales correspondiente a su grado y el de Caída Libre Militar. La mayoría de sus elementos proviene de los pelotones de Precursores de Asalto Aéreo de los distintos Batallones y los que no en algún momento de su encuadramiento en la Fuerza Especial tendrán que cursarlo. Los elementos de la Fuerza Especial también realizan constantemente cursos en el extranjero y con el Cuerpo de Fuerzas Especiales y la Marina Armada de México.

El curso básico tiene una duración de cinco semanas, divididas en 4 fases; de fuselaje, torre, arneses fijos y de caída fija, móvil y saltos de calificación.
El curso básico de caída libre tiene una duración de 5 semanas. El curso de precursor de asalto aéreo tiene una duración de 6 meses. Y es el único curso del ejército mexicano similar al curso de COIFES y CSFES accesible para elementos de tropa además de también especializar a los cursantes en operaciones anfibias y se caracteriza por el alto grado de presión física y mental.

El curso de media y alta montaña es el curso más completo de montañismo dentro de las fuerzas armadas mexicanas y consta de una duración de 6 semanas en las que existe una fase de especialización en rescate en montaña en diferentes escenarios del país.

Fuentes bibliográficas
 Fraternidad de paracaidistas militares, México, Ed. José Cuellar, p.11-18.