El Ministerio de Defensa de Japón tiene previsto iniciar el desarrollo de un nuevo caza de quinta generación para su Fuerza Aérea de Autodefensa, informó un diario local.

Según declaró al medio una fuente del gobierno, la nueva aeronave sustituirá a los cazas Mitsubishi F-2, similares al F-16 cuya vida útil termina en la década de los treinta. Actualmente, Japón cuenta con 92 cazas de este tipo

Asimismo, Tokio ha rechazado las propuestas de las empresas estadounidenses Lockheed Martin y Boeing y de la británica BAE para una modernización adaptada de los F-22, F-15 o Eurofighter Typhoon, reveló la fuente.

Según el medio, la modernización del F-22 para Japón resultará demasiado cara, además no hay una postura clara sobre la posibilidad de que el gobierno estadounidense levante la prohibición de exportacione vigente para los cazas F-22.

De este modo, Japón apuesta por la fabricación de su propio avión militar furtivo. El proyecto fue apoyado por los grupos de industria de defensa y algunos legisladores del Partido Liberal Demócrata japonés. No obstante, los costos muy altos y la falta de experiencia podrían convertirse en obstáculos para la fabricación del nuevo caza nipón.

El Ministerio de Defensa ya ha invertido más de 1,5 millones de dólares en investigación y desarrollo del motor y el sistema electrónico a bordo para un hipotético caza, llamado X-2.

​A pesar de optar por su propio camino, Japón tiene previsto atraer a inversores británicos, alemanes o franceses para participar en el proyecto.

El avión tiene el sobrenombre de Shinshin, nombre dado al proyecto de carácter clasificado hasta su presentación oficial en enero pasado, ha sido desarrollado por el Ministerio de Defensa Japonés con la participación de Mitsubishi Heavy Industries y otras  empresas niponas. Su desarrollo ha durado siete años y costado 40.000 millones de yenes que equivalen a 32,2 millones de euros y supone un paso en la reciente apertura del país asiático a la exportación de equipamiento militar. El aeropuerto de Nagoya, fue el escenario de la prueba del X-2. La prueba ha contado con la supervisión del ministro de Defensa, Gen Nakatani, que afirmó que el proyecto «avanza con firmeza», según la cadena estatal nipona NHK.

Japón había expresado su interés de contar con el primer avión operacional de quinta generación el F-22 Raptor y ante la imposibilidad de exportarlos, debido a la legislación estadounidense, se decidió construir su propia versión, de ahí que el diseño del X-2 sea ligeramente familiar al F-22.