Finalmente la Patrulla Oceánica de Largo Alcance (POLA) sera puesta en el mar el 23 de noviembre de 2018, para iniciar sus pruebas de sistemas y armamento. 
Es de un amplio interés conocer qué hará la Marina para equipar sus nuevas fragatas o Patrulleras Oceánicas de Largo Alcance o POLA como eufemística mente se les llama. Hasta el momento es difícil pensar que Thales o la misma DAMEN cederán terreno contractual para que la Armada instale sus propios sistemas de tiro desarrollados en México, aunque nada está escrito en piedra, de un modo u otro los sistemas que se implementen en la nueva POLA  serán de última generación.
Tomemos en cuenta que aunque no sabemos cómo bautizará la Armada a esta nueva Clase de buque, se tienen indicios de que se podrían incorporar cinco más antes de 2024, lo que significa una jugosa serie de oportunidades en sistemas de armamento que podrían manejarse en México por mano de obra mexicana o al caso por empresas ya establecidas en México y que puedan fortalecer  la industria mexicana.
Una importante parte de este proyecto tratará sobre qué helicópteros operarán a bordo de las mismas. La solución fácil es decir  que se complementarán de la flota de helicópteros Panther que actualmente están en uso y en entregas, pero  despachar cinco helicópteros a navíos  que pueden tener rutas y tiempos de viaje mucho más amplios que las actuales Patrulleras Oceánicas o Patrulleras Costeras estaría dejando descubiertas las necesidades de aeronaves sobre tierra.
Después de todo, no sólo estas nueva Clase será portadora de helicópteros embarcados,  los buques en uso actualmente ya llevan una dotación lo que significa que en algún punto y paralelo a la introducción de las mismas se tendrá que introducir una plataforma de ala rotativa especializada para operar en el mar, incluso crear o equipar un nuevo escuadrón.
Los candidatos
Siendo honestos como nos gusta, los candidatos ideales y obvios para esta tarea son sólo dos aeronaves. La apuesta pone en competencia a dos de los principales socios de la Secretaría de Marina y Armada: Airbus y Sikorsky. Como dijimos en absoluta honestidad, esto es a causa de que actualmente en México ningún otro constructor tiene el lobby, mercado y potencial industrial que estos dos gigantes tienen sobre suelo mexicano.
Ambas son máquinas excelentes y probadas en combate no sólo en México, sino en el mundo, pero ¿qué diferencias existen entre ambos candidatos?  y ¿qué beneficios aportarían a México? Como lo hemos dicho en muchas ocasiones, Airbus tiene una fuerte inversión en México, con una cartera en expansión y que ya no sólo cubre el segmento del mercado de helicópteros, sino que crece cada vez más en la manufactura de componentes de aviones. Airbus ha logrado conquistar el nicho de la aviación naval en México casi dejando fuera de juego a los MD Explorer, sino que en la Fuerza Aérea ha montado un centro de mantenimiento y su cartera incluye la mayoría de transportes de ambas secretarías y cerca de un 30% de la flota de helicópteros de la SEDENA.

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Sikorsky por su lado podría no tener una presencia tan fuerte y de alto perfil en México, pero es un socio de mucho tiempo de la SEDENA y que ha estado presente dando soporte a sus productos por más de veinte años, pensemos que, el que los seis S-70 Black Hawk comprados en 1991 y 1994 aún vuelan y sin incidentes es testimonio no sólo de la calidad de sus máquinas, sino del mantenimiento, enseñanzas  y soporte por escaso que este podría ser actualmente, ya que es altamente probable que la FAM unilateralmente se haga cargo de los ciclos de mantenimiento de estas seis aeronaves.
Por supuesto Sikorsky tiene una distinción especial, logró ganarle el mercado de los helicópteros medios y tácticos a Rusia, una proeza nada fácil de ejecutar, aunque en toda justicia, la falta notable de inversión en México y el pobre cuidado de cliente que los Rusos han demostrado en México, pudieron haber hecho la decisión de la FAM y Armada de incorporar los UH-60M, infinitamente más fácil, de este modo en México en los siguientes años tendremos operando casi 40 helicópteros Black hawk de diferentes series y en diferentes instituciones en el país.
Esto yuxtapone dos candidatos para operar a bordo de las POLA: Panter o Black Hawk. El MH-60 Seahawk  tiene la ventaja de que homologa su cabina con al de los UH-60M ya en uso con la Armada, aparte de contar con un simulador móvil de la SEMAR, aparte de que pese a su configuración naval, un Sea Hawk puede operar libremente entre tierra y mar, no así un UH -60M que por su tren de aterrizaje trasero podría tener más dificultades para aterrizar en un buque.

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Por su parte el Panther es una aeronave increíble mente veloz y refinada para operaciones marinas y la Armada ya cuenta con una enorme experiencia utilizándolas no sólo en apoyo de su infantería, sino en operaciones de seguridad y rescate desde la PO de la Armada, una ventaja que Sikorsky no tiene, aunque él Sea Hawk es un poco más pesado y robusto, lo que aparte de poder transportar más personal, resulta un poco más costoso pero que en el largo término podría resultar más apto para una Fragata con radios de acción y sistemas de armas mas robustos.
La cuestión de las refacciones y partes es un tema salvado pues ambos productos están resguardados por la industria en México por lo que la decisión es tremendamente difícil de advertir, ambas son máquinas completamente fabulosas, sin embargo su consideración y uso dependerá del perfil que la Armada le dé a sus nuevas POLA, dependerá de los sistemas que introduzca y el uso que les asigne. ¿A ustedes cuál candidato les gusta más?