El día de hoy se inició la reestructura en la secretaría de la Defensa Nacional con el inicio de funciones de la Comandancia del Ejército Mexicano.
Durante el evento realizado el día de hoy en el campo Marte el general Luis Cresencio Sandoval González, secretario de la Defensa Nacional, declaro respecto a esta nueva organización administrativa lo siguiente:

El objetivo es que la Secretaría de la Defensa Nacional, el Ejército y la Fuerza Aérea mantengan un óptimo nivel de eficacia y eficiencia en el servicio permanente que se brinda a la ciudadanía. Por ello, la necesidad de evolucionar es constante y siempre se basa en una planeación bien estructurada y definida.


De esta manera en el Plan Sectorial de Defensa Nacional 2020-2024 se establecieron como acciones puntuales adecuar la estructura orgánica de la Secretaría de la Defensa Nacional y desarrollar el proyecto para la creación de la Comandancia del Ejército Mexicano y su Estado mayor.

Por lo tanto, y para materializar estas acciones, en la presente administración se retomó el análisis que desde hace tiempo se ha venido realizando sobre el papel de la Secretaría de la Defensa Nacional en cuanto a que realiza sus acciones bajo dos significados:

Primero, como órgano de la Administración Pública Federal que tiene a su cargo el desahogo de las atribuciones establecidas en la ley orgánica de la materia. Y segundo, como cuartel general superior del Ejército y Fuerza Aérea, con la responsabilidad del cumplimiento de las misiones generales que por ley les corresponden.
Como resultado se identificó la necesidad de precisar y diferenciar sus funciones en esas dos acepciones, además se observó que en el ámbito de las relaciones militares que se tienen con otras naciones existía la necesidad de hacer compatible nuestra estructura, redefiniendo la representación internacional con una clara jerarquización, ministerio de defensa, ejército, de tal manera que el secretario de la Defensa Nacional atiende a los asuntos de nivel ministerio, en tanto que comandante del Ejército participe en lo que son a nivel de Fuerzas Armadas.
El objetivo final es fortalecer la eficiencia organizativa que nos permita estar a la altura de las exigencias actuales y de la modernidad.

Conscientes de que una estructura flexible y práctica hace posible un mejor funcionamiento con una gestión corresponsable en cada ámbito y un óptimo empleo de los recursos humanos, financieros y materiales que la nación pone a disposición del Ejército y la Fuerza Aérea para el cumplimiento de sus responsabilidades.
A partir de estas consideraciones se determinó homologar la estructura funcional de las Fuerzas Armadas de tierra y aíre, de tal manera que al igual que la Fuerza Aérea, el Ejército Mexicano cuente con su propia comandancia y su Estado Mayor, que se hará cargo del desarrollo de la fuerza, la generación de doctrina, el adiestramiento, su equipamiento y control administrativo, funciones que antes materializaba el Estado Mayor de la Defensa Nacional.
Ambas comandancias del Ejército y de la Fuerza Aérea estarán subordinadas a la Secretaría de la Defensa Nacional y el secretario continuará ejerciendo el alto mando de las dos Fuerzas Armadas.

En su intervención el nuevo comandante del ejército el general de división diplomado de Estado Mayor Eufemio Alberto Ibarra Flores señalo:

Nos enfocaremos en el desarrollo de la fuerza con especial atención en tres rubros importantes:
Primero. La generación de doctrina a través de la revisión y actualización de las tácticas, la adecuación de los procedimientos sistemáticos de operar, así como en el análisis de las lecciones aprendidas para identificar aspectos en los que podamos mejorar.

Segundo. El impulso de un adiestramiento realista, objetivo y práctico, orientado al cumplimiento de las misiones orgánicas que tenemos asignadas, a la resolución de situaciones complejas que enfrenta el personal militar en el desarrollo de las operaciones y al irrestricto respeto de los derechos humanos.
Tercero. La estandarización, modernización y proyección de un nuevo equipamiento que brinde al personal mayor protección y comodidad en el desarrollo de sus actividades diarias.

Todo lo anterior complementado con un eficiente control administrativo que garantice el cumplimiento de las misiones mediante el trabajo colaborativo de las direcciones generales que conforman la estructura técnica y administrativa del Ejército, cuidando del mayor activo institucional que es el recurso humano.
Para ello, mantendremos una permanente y estrecha coordinación con el Estado Mayor de la Defensa Nacional, con la Comandancia de la Fuerza Aérea y con los mandos territoriales donde están las unidades establecidas del Ejército.