Por Jose Antonio Quevedo

En el proyecto del Presupuesto de Egresos de la Federación presentado por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público se tiene contemplado destinar 475.3 millones de pesos para el pago del avión presidencial.

Según el apartado «Programas Presupuestarios con Programas y Proyecto de Inversión», se tiene contemplada la partida 12071320003, con la leyenda: «Adquisición de una Aeronave de Transporte Estratégico para uso Presidencial y del Estado Mayor». El prefijo 12 del proyecto de inversión indica que se inició en el año 2012, por lo que corresponde al avión Boeing 787-8. El documento menciona que se ha cubierto 3,239 millones del monto total de la aeronave que es de 5,792 millones de pesos, por lo que para 2022, se tiene proyectado erogar un monto de 475.3 millones

El avión presidencial se adquirió en el sexenio 2006-2012, operando ya en el gobierno anterior, siendo enviado a resguardo a California en diciembre de 2018, para su venta, sin éxito. El pretexto para no usarlo y ponerlo en venta es que el avión es considerado como lujoso por el actual presidente, aunque en México solo la aerolínea Aeroméxico opera 19 aviones de este tipo volando a Sudamérica, Europa y Asia.

Luego de 19 meses en ese país regresó a México y quedó bajo resguardo de la Secretaría de la Defensa Nacional, generando más gastos para su mantenimiento y preservación. Por más de 26 meses, se ha buscado vender al avión Presidencial, pero hasta ahora no se ha conseguido.

En septiembre de 2019, el avión se rifó a través de la venta de billetes de lotería. Hasta el momento se desconoce el uso que se lea dado al dinero obtenido en el sorteo.